Desde que el BCE el pasado 7 noviembre bajara el precio oficial del dinero en la Zona Euro desde el 0,5% hasta el 0,25%, no ha provocado ninguna consecuencia en el Euribor a 12 meses, la referencia para la mayoría de las hipotecas de tipo variable en España.
De hecho, este índice ha subido durante estos meses desde el 0,506 del mes de noviembre de 2013 hasta el 0,6% que marcará este mes de abril de 2014.
Esta evolución del Euribor responde directamente al descenso de la liquidez en la Eurozona.
En 2011 y 2013 mediante 2 operaciones de financiación a largo plazo, el BCE prestó 1 billón de euros a las entidades financieras por un plazo máximo de 3 años, que ahora los bancos ya están devolviendo.
Esta menor liquidez ya se nota en la reducción de la cuantía de dinero que los bancos aparcan en el BCE (facilidad de depósitos): desde los 800.000 millones en 2012 hasta los 30.000 millones de ahora (quizás también haya tenido algo que ver que el BCE dejara de remunerar este dinero).
Por otra parte, también están bajando los depósitos de las familias que están moviendo su dinero hacia otros productos más rentables debido a la baja remuneración de los mismos, haciendo descender aún más la liquidez de los bancos.
O bien Dragui, el presidente de BCE, lanza nuevas medidas para dar liquidez al sistema financiero, o lo más probable es que los bancos vuelvan su mirada hacia los ahorradores para captar liquidez, haciendo que vuelva la guerra de depósitos, que fue atada y bien atada por el Banco de España imponiendo unos límites o lo que se inventen para poder saltar estas recomendaciones.
Eso sí, si hay una nueva guerra para captar liquidez, no será de un día para otro, sino que todo ocurrirá poco a poco. Tened en cuenta que el Euribor suele evoluciona lentamente y la cuantía de los depósitos aún siguen en máximos históricos.