Después de 5 años en el Banco Santander en el que he obtenido bastantes beneficios con la Cuenta 123 (entornos a unos 1.500€ entre remuneración y bonificaciones), finalmente he decidido irme de la entidad a la vista de la llegada de Santander One.

Muchos me preguntaréis: ¿por qué seguías en el Santander? Las razones son principalmente dos: estar al tanto de los movimientos de la entidad para www.tucapital.es y porque después de la Cuenta 123, la Cuenta Zero exigía unas vinculaciones que ya tenía y por las mismas, ningún otro banco me ofrecía nada (autónomos + recibos + tarjeta).

Pero con Santander One, la cosa cambia y vendrá comisiones y como editor de www.tucapital.es no podía permitir eso (imagínate, qué contradicción).

El proceso de baja

Como ya dijimos, la forma más fácil es solicitar una portabilidad, que sería tan fácil como acudir a otra entidad, abrir una cuenta y pedir que te mueva todo por ti.

Pero queríamos escribir este artículo e hice la baja a «mano»:

1. Solicité el cambio de recibos y domiciliaciones:

Tienes que recopilar todos los recibos que tengas en el banco. Puedes verlo en la sección de «Recibos» de tu banca electrónica. De todas formas, recomendamos descargar  los movimientos del último año y comprobar que no haya otros recibos y de paso ya tienes esos movimientos para tu contabilidad.

El recibo más complicado es el de la Seguridad Social (autónomos), no por el proceso (vía online), sino por los plazos (cuándo comenzaría a cobrar en la nueva cuenta). Lo hice con tiempo.

El resto de los recibos, se podía hacer vía online en el portal cliente de los servicios o haciéndoles una simple llamada, se aplicará de forma inmediata.

2. Vendí la única acción del Santander que me dieron por abrir la cuenta Zero:

Sí, tenía una acción a pesar de haber firmado el documento de renuncia de la acción cuando contraté la Cuenta 123, pero al cambiarme a la Cuenta Zero, me la enchufaron y no hice nada (mal hecho, pensé).

Hay que hacerlo con tiempo. Lo ideal sería 1 semana. Cuando cierras una cuenta, hay que cerrar la cuenta de valores y para eso, debe de estar todo liquidado y consolidado. En caso contrario no te dejarán.

Nosotros decidimos forzar la máquina y hacerlo en el mismo día para ver lo que ocurre (os lo cuento más adelante).

Recibí una sorpresa, cuando se ejecutó la operación y se liquidó. No me habían cobrado nada, todo lo contrario, me ingresaron 0,50€. ¿Cómo es posible? si entre las comisiones que figura en la venta de acciones como mínimo es de 3€.

Salvo que esté bonificado la venta de acciones del propio banco… no lo entendemos muy bien. Me podría haber cobrado los 3€ y no me habría quejado.

3. Pedí Cita en el Banco

Actualmente, el Banco Santander exige cita previa si quieres acudir a una de sus oficinas.

Para conseguir una cita has de entrar en su banca electrónica y en «Atención al cliente» pides una cita de tu oficina. Te deja indicar el día (desde el día siguiente) y tramos de 1 hora y media: (8:30 a 10:00, 10:00 a 11:30, 11:30 a 13:00 y 13:00 a 14:30)

Son un poco impresentables. Yo solicité cita para entre las 11:30 y 13:00 y no me llamaron hasta las 12:01. En ese momento ya estaba de camino y le dije que iría ya y no pusieron pegas.

4. Si tienes tarjeta de crédito, pide baja por teléfono

Si tienes una tarjeta de crédito, lo tienes que cancelar llamando al 912769503 y has de hacerlo antes de cancelar la cuenta. En la oficina no puede hacerlo por ti.

Lo ideal es hacerlo antes de ir a la cita, en caso contrario tendrás que hacerlo ahí mismo y antes de cerrar la cuenta. Eso me ocurrió cuando hice el cambio de la Cuenta 123 a la Zero.

En esta ocasión no tengo tarjeta de crédito.

5. Cancelar la cuenta en el banco

Llega la hora de la verdad, entramos en la oficina, y casi nadie. En la entrada nos dimos gel, y una empleada me pregunta si teníamos cita, y nos indica a dónde tenemos que dirigirnos.

Ya en la mesa, le comento que quería cerrar la cuenta porque no voy a cumplir las condiciones de Santander One y lógicamente no quería pagar comisiones, cosa que aceptó sin ninguna contra oferta, ni nada de nada (creo que ya es una tarea rutinaria).

Le entrego la tarjeta de débito y el DNI y nada más empezar, le veo poner «caras». Le pregunto y me contesta que no le deja, que tengo una cuenta de valores y que hay un movimiento pendiente de consolidar.

Tras pasar un buen rato, me dice que no puede cerrar la cuenta en ese momento… a lo que le dice que no quería volver (cita, trabajo, covid…).

Me indica que no me preocupe, que va a hacer una solicitud de cierre de cuenta pero, hay que dejar una provisión de fondos para liquidar la cuenta. Pero al indicarle que mi cuenta no tiene comisiones, me dio la razón. Se deja «a 0» y él ya se encargaría de cerrarla cuando pueda (1 o 2 días).

Al no entregarme ninguna copia, ni resguardo, le pedí su teléfono para por si acaso pasado unos días, y la cuenta seguía abierta. Ayer solicité el cierre y hoy la cuenta sigue viva. Veremos lo que tarda.

Conversación con el banquero

Mientras estaba cerrando la cuenta, estuvimos charlando, y que os lo transcribo más o menos lo que hablamos:

Yo: ¿Cuándo entrará en vigor lo de Santander One?

Banquero: En breve vamos a enviar las cartas con las nuevas condiciones. En principio, se prevé que entrará en vigor antes de terminar el año.

Yo: Vaya vaivenes con las condiciones, hay que estudiar unas oposiciones para saber lo que hay que hacer para que Santander no te cobre.

Banquero: La jefa. Vamos a perder muchos clientes. Con qué banco vas a trabajar.

Yo: (Le quería poner un aprieto…) Pues con vosotros mismos.

Banquero: ¿Cómo?

Yo: Tengo cuenta en Openbank, y trabajaré desde ahora principalmente con ellos. Voy a tener lo mismo, pero sin nada de todos estos rollos.

Banquero: Ya… pero que sepas que están estudiando fusionar el Santander con Openbank.

Yo: (ya estoy informado, la fusión es de Openbank con Santander Consumer). ¿No era con Santander Consumer?

Banquero: Están estudiando, ya veremos cuál es el resultado.

…