El trading o inversión online ha irrumpido con la fuerza de un tsunami en el mundo de las finanzas internacionales. Así como hace unos años la única forma de adentrarse en este espacio era a través de los métodos tradicionales —mediante un corredor de bolsa y con un capital considerable—, la llegada del trading en línea ha aumentado el espectro social de personas que pueden conseguir acceso (al rebajar la cantidad de capital necesario) y, también, la forma de hacerlo (desde casa y con un portátil o un móvil).

Por definirlo, se puede decir que el trading online es una variante de la inversión clásica en la que los traders operan con productos derivados mediante un bróker en línea. Esto permite que los costos iniciales sean mucho menores, aunque también, como contraparte, aumenta el riesgo en las operaciones (pudiendo perder más dinero del inicialmente invertido), por lo que es importante tener muchas horas de entrenamiento a las espaldas, y un conocimiento profundo de los riesgos que implica operar con productos derivados o CFDs.

A continuación, vamos a dejar algunos consejos iniciales para todos aquellos que busquen dar sus primeros pasos en este mundo, desde la elección de un bróker online como, por ejemplo, Plus500, hasta los diferentes tipos de activos en los que se puede operar.

La elección de un bróker

Después de realizar un estudio del mercado en el que uno está dispuesto a adentrarse y valorar las posibilidades que éste le ofrece, el primer paso de un trader online en nivel inicial es escoger un buen bróker online. Y esto no es fácil, ya que la oferta hoy en día es abrumadora. Como ocurre en cualquier otro sector de la sociedad con presencia en internet, el número de opciones son incontables, pero solo unas pocas merecen realmente la pena.

Algunas de las características que se deben vigilar especialmente a la hora de escoger un bróker online es el número de mercados y activos sobre los que ofrece la opción de invertir, sus costos y tasas, que cumpla con todas las obligaciones regulatorias del país en cuestión, o que cuente con una potente sección educativa. Cada uno valorará la importancia de dichos aspectos de forma personal y le otorgará más o menos peso a la hora de tomar su decisión.

Escoge uno o dos tipos de activos en los que invertir

Dentro de los propios brókeres, la oferta de activos en los que se puede operar suele ser muy amplia. Así pues, lo mejor que se puede hacer en los primeros pasos en la inversión online es centrarse en uno o dos activos en los que comenzar a realizar operaciones. Y es que la única forma de buscar beneficios en el trading es entendiendo a la perfección cada producto en el que se pone el dinero.

Por resumir, la clave del éxito en la inversión online se puede resumir en tres palabras: estudio, estudio y estudio.

Los diferentes sectores

Los principales grupos de activos con presencia en los mercados online son las acciones, las divisas, las criptomonedas, las materias primas y los índices bursátiles. Cada uno de estos espacios cuenta con unas características muy diferenciadas y que se adaptan de maneras diversas a las necesidades de cada inversor.

Por ejemplo, el sector de las criptomonedas cuenta con una volatilidad brutal, por lo que sus precios pueden sufrir cambios bruscos en cuestión de minutos. Por ello, si no buscas emociones fuertes o prefieres poner tu dinero en un espacio más calmado, quizás deberías inclinarte por una opción como las materias primas o las divisas.

Practica en una cuenta demo

Actualmente, la mayoría de brókeres de reputación cuentan con cuentas demo en las que los traders pueden comenzar a fraguarse en el mundillo, entender los movimientos o, incluso, practicar sus propias estrategias. Este tipo de cuentas ofrecen la posibilidad de operar con movimientos reales del mercado, pero con dinero ficticio, por lo que suponen el lugar perfecto para foguearse y ganar experiencia antes de dar el salto a las grandes ligas.

Nunca te sobrevalores, siempre sé precavido

Aunque es posible que las primeras operaciones en el trading online puedan resultarte exitosas, ningún buen inversor debe caer en el error de sobrevalorarse o pensar que entiende los mercados financieros a la perfección. Tanto la bolsa, como las criptomonedas, como las materias primas, como cualquier otro activo se comportan a veces de manera inesperada y no hay conocimiento posible que pueda anticiparse a ello. Por esta razón, la virtud más importante de un inversor no es el conocimiento, sino la cautela.