He hecho una transferencia y he enviado un dinero a un desconocido; Me ha bailado un «0», y he transferido 10 veces más dinero de lo que quería; ¿qué pasa cuando nos confundimos en una transferencia? ¿Hay solución?
Confundirse de número de cuenta bancaria es complicado, ya que el propio código de una cuenta bancaria (CCC) dispone de un dígito de control que verifica si es o no correcto y antes de que un banco permita realizar una transferencia comprueba este código y como es lógico es difícil de atinar con número de cuenta y un código de control correspondiente.
Eso sí, es más fácil confundirse cuando el banco nos permite guardar una lista de cuentas favoritas y al seleccionar, elegimos el que no queríamos o simplemente introducimos por error una cuantía diferente al que queríamos transferir.
Todas estas confusiones, con mayor o menor dificultar, al final tiene solución, pero su complejidad depende de lo rápido que reaccionemos.
Si te das cuenta rápido de la confusión:
(1) Exclusivamente electrónica. |
(2) Apertura en oficinas físicas, con operativa por internet |
Dependiendo de la entidad financiera, cierran contablemente los procesos de liquidación a cierta hora del día. Antes de dicha hora de cierre puedes cancelar la operación sin problemas.
«Lo malo» es que recientemente algunas entidades, sobre todo las online, envían las transferencia casi en el momento y si el dinero ya ha llegado al destinatario, la transferencia ya no se puede cancelar.
Si el dinero ya llegó al destinatario:
Existe 2 posibles alternativas.
1. Hablar directamente con el destinatario del dinero
Lo más fácil y mejor solución es ponerse directamente en contacto con el destinatario del dinero para que nos devuelva el dinero.
Lógicamente para ello, debemos conocer al titular de la cuenta destino del dinero, porque los bancos no nos darán datos del mismo por la ley de protección de datos.
Por lo tanto, si por casualidad diéramos con un código de cuenta correcto, pero que no coincide con el que queríamos transferir, no podemos utilizar este método para recuperar los fondos, porque no tenemos los datos de contacto del titular de dicha cuenta.
2. Hablar con el banco
Puedes dirigirte a la entidad financiera donde emitiste la transferencia y que éste solicite al banco destinatario la devolución del dinero.
Éste a su vez ha de pedir al cliente en cuestión permiso para retroceder el dinero a origen. Sin dicha autorización, no nos devolverá el dinero.
Además por esta gestión, tendrás que pagar seguramente una comisión independientemente de si finalmente sea fructífera o no.
Si no nos quiere devolver el dinero
Tanto si nos hemos puesto en contacto directamente con el titular de la cuenta destino de nuestra transferencia como si hemos utilizado los servicios de nuestro banco para realizar tal gestión no diera resultado, no queda otra opción que reclamarlo vía judicial.
Eso sí, puedes reclamar el dinero, los intereses legales de dicho dinero e incluso las costas judiciales.