Todos los bancos sanos, los que no han necesitado ayuda estatal, entrarán en el banco malo (SEREB) salvo BBVA que se ha negado de forma rotunda, ya que según su presidente «la participación en el banco malo contamina a los bancos bueno».
De esta forma entrarán 15 entidades, cuya aportación se fijará en función de cuatro criterios:
- Cuota de mercado en activos: 50%
- Cuota de exposición inmobiliaria: 30%
- Cuota de negocio internacional
Con estos criterios, las cuotas de participación será:
En total, sumarán 2.050 millones, de los que unos 400 serán capital puro -frente a los 500 estimados hasta ahora- y el resto deuda subordinada, que pagará un interés del 8% y cuya colocación ha sido mucho más sencilla que la de las acciones.
Por último la negativa de BBVA no le saldrá gratis, porque según informa elconfidencial, es posible que el gobierno exija aportaciones extras al FGD a las entidades que no hayan entrado en el SEREB, es decir, BBVA.