Esta es la misma pregunta con la que el equipo de Territorio Creativo encabeza un estudio con conclusiones demoledoras para el sector financiero tradicional. Destaca que la generación iGen en España, que son aquellos jóvenes que hoy en día tienen entre 16 y 25 años, tiene una muy mala imagen  de la banca tradicional, y además prefiere la banca móvil a la sucursal bancaria de toda la vida. Las conclusiones del estudio las podemos encontrar en su página web.

Profundos Cambios en la INDUSTRIA BANCARIA

Este cambio de paradigma está transformando la industria bancaria, hasta el punto de que los grandes grupos financieros tradicionales se están adaptando a marchas forzadas. Se estima que los bancos más grandes de nuestro país invierten un 5% de sus gastos en tecnología. A pesar de ello y a tenor de lo visto, no es suficiente para poder adaptarse a las nuevas generaciones, que cada vez se inclinan a opciones totalmente disruptivas centradas en la banca a distancia. No en vano, los mayores crecimientos de clientes se registran en bancos online como ING, EVO Bank u Open Bank.

Todo esto se traduce en que las sucursales bancarias son visitadas con menor frecuencia. Esto, junto con la mayor automatización de tareas que brinda la inteligencia artificial, aboca al sector bancario a empezar a plantear el cierre de sucursales, amén de despidos masivos, para tratar de ajustar sus exiguos márgenes de beneficios.

Por lo tanto, las directrices que sigue la banca para tratar de renovarse son una mayor automatización junto con un servicio cada vez más personalizado. El toque humano se puede seguir prestando con herramientas como los chats en línea, que aquí se explican detenidamente, y que cada vez son más comunes en el mundo digital.

Por otra parte, la generalización de las aplicaciones móviles como Bizum, de la que os hablamos anteriormente, permiten automatizar un sinfín de procesos y servicios. Además de ello, se recopila toda la información del usuario mientras navega por la aplicación, lo que permite conocer a fondo su comportamiento en línea, y en consecuencia sus necesidades latentes.

NUEVOS ACTORES EN EL MUNDO FINANCIERO

La banca, tal y como la hemos conocido hasta día de hoy, probablemente no sobrevivirá al cambio de la década. Los cambios son de mayor rango y cada vez acontecen a mayor velocidad. A estos retos, la banca también le tiene que sumar la aparición en escena de empresas asentadas y no tan asentadas, que prometen irrumpir con fuerza en la industria financiera.

Tal es el caso de Fintechs como Mooverang, startups que ofrecen servicios financieros de forma más eficaz y menos costosa, dada su mayor agilidad y menor estructura corporativa. Por otra parte, actores inesperados como Google o Facebook ya llevan muy avanzados los trámites necesarios para operar como bancos. La ventaja de estas empresas viene dada por una parte, por la ingente cantidad de datos que manejan de sus usuarios. Por otra parte, estas mismas empresas ofrecen los productos y servicios que sus mismos usuarios saben que demandan, por lo que el negocio les puede salir redondo.

La innovación se ha instalado como prioridad en las agendas de la banca, un sector que solía estar anclado tecnológicamente en el pasado. Ahora, esa actitud les está pasando factura, y es que lo que básicamente nos ofrece la tecnología, es hacer la vida más fácil a la gente. Algo que cualquier empresa que se preste, no debería olvidar.